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1.- Más vale tarde que nunca
2.- A caballo regalado no se le mira el diente
3.- Ojos que no ven, corazón que no siente
4.- El que mucho abarca, poco aprieta
5.- Quien siembra vientos, recoge tempestades
6.- En boca cerrada no entran moscas
7.- No hay mal que por bien no venga
8.- Al mal tiempo, buena cara
9.- Cría cuervos y te sacarán los ojos
10.- El que ríe último, ríe mejor
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10 ejemplos de dichos populares y sus significados profundos
El que mucho abarca, poco aprieta: significa que si intentamos hacer muchas cosas al mismo tiempo, es probable que no podamos realizar ninguna con la calidad y dedicación necesaria.
No hay mal que por bien no venga: es un recordatorio de que incluso de las situaciones difíciles o desfavorables, se pueden extraer aspectos positivos y aprendizajes importantes.
Más vale tarde que nunca: nos indica que es preferible hacer algo tarde que no hacerlo en absoluto, destacando la importancia de tomar acción en lugar de procrastinar.
A quien madruga, Dios lo ayuda: resalta la importancia de la diligencia y el esfuerzo, sugiriendo que aquellos que se levantan temprano son favorecidos por la suerte o la divina providencia.
Cría cuervos y te sacarán los ojos: advierte sobre los riesgos de confiar ciegamente en personas que pueden traicionarnos o aprovecharse de nuestra bondad.
La paciencia es la madre de todas las virtudes: subraya la importancia de saber esperar y ser constante en la búsqueda de nuestros objetivos, resaltando la virtud de la paciencia como base para alcanzar el éxito.
En boca cerrada no entran moscas: nos recuerda la importancia de saber cuándo es conveniente callar y escuchar, evitando problemas innecesarios derivados de hablar de más.
Quien siembra vientos, cosecha tempestades: hace hincapié en las consecuencias negativas que pueden surgir de nuestras acciones impulsivas o irresponsables, advirtiendo sobre la importancia de actuar con prudencia.
Al mal tiempo, buena cara: nos insta a mantener una actitud positiva y optimista incluso en situaciones adversas, enfatizando la importancia de la resiliencia y la capacidad de adaptación.
Más vale prevenir que lamentar: destaca la importancia de anticiparse a los problemas y tomar medidas preventivas, en lugar de lamentarse por las consecuencias negativas que podrían evitarse con la debida precaución.